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23/1/2023
Ha llegado el frío y con él la necesidad de cuidar nuestros ojos, porque los meses más fríos del año también pueden suponer una amenaza para la salud ocular y, especialmente, porque en estos periodos del año se produce una mayor incidencia de irritaciones oculares. Por eso, el Instituto Canario de Retina-ICARE les ofrece una serie de recomendaciones para cuidar sus ojos cuando aprieta el frío.
Las temperaturas extremas, las contrarias a las del verano; las calefacciones y aires acondicionados, que disminuyen la humedad de los hogares y de los medios de transporte; y el viento, son factores que aumentan las posibilidades de padecer sequedad ocular y con ella, escozor en los ojos y visión borrosa.
La sequedad ocular nos puede inducir, además, a frotarnos los ojos, lo que puede acabar trayendo como consecuencia, a su vez, lesiones oculares e infecciones, como las conjuntivitis víricas, generadas, en muchas ocasiones, por los mismos virus que provocan el resfriado común y que suelen producir el enrojecimiento del ojo y la secreción de legañas y, casi siempre, el rápido contagio al otro ojo.
Para evitarlo es muy importante mantener una temperatura ambiente no demasiado alta y es recomendable el uso de lágrima artificial, que forma una película protectora encima de la córnea, en la superficie del ojo, que permite mantenerlo siempre húmedo.
Si nos encontramos en el exterior, sobre todo con temperaturas muy bajas o con mucho viento, la sequedad del ojo será incluso mayor que en periodos de calor, por lo que es aconsejable, además de usar lágrimas artificiales, usar gafas protectoras.
Esas gafas, además, nos ayudarán a proteger nuestros ojos del peligroso sol de invierno, porque, aunque, el sol brille con menos intensidad o durante menos tiempo, lo cierto es que, por su situación y ángulo en relación con la tierra, puede incrementar nuestra exposición a la radiación ultravioleta, que acelera la aparición de cataratas y alteraciones maculares, dos patologías muy frecuentes entre las personas mayores.
Por todo ello, y aprovechando que hay menor actividad lúdica, los meses de invierno son un buen momento para acercarnos a la consulta del oftalmólogo en el Instituto Canario de Retina-ICARE, solicitar una revisión de nuestra salud ocular, detectar a tiempo cualquier problema que podamos presentar y resolver cualquier patología que nos pueda afectar.